Al Romero se le conoce como el Ginseng del Mediterráneo. Y es que esta planta eleva el ánimo, aumenta la concentración y remineraliza el cuerpo, por lo que es ideal para recuperarte de una enfermedad o de una época de cansancio o apatía. Pero es que la lista de sus propiedades medicinales es muy larga, por lo que es una planta para incorporar en tu día a día.
Rosmarinus officinalis L. Parte utilizada: Hojas y sumidades floridas. Origen y hábitat: Crece en bosques de la tierra baja. Habitual en las regiones secas y áridas del sur de Europa.
Temperatura de infusión: 100ºC. Tiempo de infusión: 10 min.
- Devuelve la vitalidad perdida y regenera la energía del cuerpo. Muy útil en fatiga, cansancio y desgaste, ya sea por enfermedades motoras o por actividad física elevada. - Estimula la secreción biliar y protege y estimula el hígado. - Reduce los gases acumulados y es muy útil en digestiones pesadas o malas digestiones. - Resulta eficaz en estados febriles, gripes, resfriados, asma y bronquitis. Ayuda a bajar la fiebre y reduce la mucosidad. - Relaja ligeramente los dolores menstruales y facilita el sangrado - Muy útil en anemia por la abundante cantidad de minerales que aporta al cuerpo. - Ayuda a combatir el envejecimiento de las células gracias a la cantidad de antioxidantes que tiene. - En uso externo, con hojas frescas sobre la piel, alivia el cansancio y combate el reumatismo de las articulaciones. También se pueden hacer con hojas secas, tendrán un efecto antiinflamatorio; actúan muy bien en la musculatura de la espalda. Es antiséptica y estimula la cicatrización de las heridas, eczemas y úlceras de piel.
Contraindicaciones (Para tratamientos largos, no para un consumo ocasional): Evitar durante el embarazo. No tomes si tienes endometriosis, gastroenteritis, protatitis, colon irritable o enfermedad de Crohn.